La marihuana puede afectar tanto positivamente como negativamente los entrenamientos. Si buscas relajarte, reducir el dolor o aumentar el apetito, puede ser útil. Sin embargo, si tu objetivo es maximizar el rendimiento y las ganancias musculares, el consumo frecuente podría interferir con la motivación, la coordinación y la recuperación, lo que puede afectar tus resultados a largo plazo.
La marihuana y el ejercicio han sido un tema de interés creciente en los últimos años, especialmente con el cambio de actitudes hacia la legalización y el uso de la marihuana en diversas partes del mundo. Algunos la ven como una herramienta para mejorar la experiencia del entrenamiento, mientras que otros se centran en sus posibles efectos negativos.
Es interesante notar que el consumo de marihuana es muy personal: algunas personas la integran a su rutina sin que afecte negativamente sus resultados, mientras que otras notan que limita su capacidad física. A lo largo de los años, las investigaciones científicas sobre el impacto de la marihuana en el ejercicio han sido limitadas, lo que deja muchas preguntas sin responder sobre los efectos a largo plazo.
Si estás pensando en usar marihuana en relación con tus entrenamientos, la clave está en probar de manera moderada, observar cómo te afecta personalmente, y ser consciente de que, como cualquier sustancia, sus efectos varían de persona a persona. Lo mejor es escuchar a tu cuerpo y tomar decisiones que apoyen tus objetivos de salud y condición física.